Durante los recientes confinamientos, la ecóloga principal del Grupo Habitat First, Doctora Phoebe Carter, notó una notable claridad en el canto de los pájaros debido a la reducción del tráfico.
Este fenómeno resalta una oportunidad crucial para reflexionar sobre cómo nuestras prácticas de viaje pueden impactar el medio ambiente.
Aunque las políticas gubernamentales son esenciales para combatir el cambio climático, las acciones individuales también juegan un papel vital.
A medida que enfrentamos la urgencia de reducir las emisiones de carbono, es imperativo considerar cómo nuestras elecciones al viajar pueden contribuir a la preservación de la naturaleza.
La biodiversidad, término que combina biología y diversidad, representa la riqueza y complejidad de los ecosistemas en la Tierra.
Para mantener un equilibrio en los ecosistemas interconectados y asegurar un futuro sostenible, es necesario reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Sin embargo, la biodiversidad está bajo amenaza. A pesar de la pausa que los últimos dos años dieron a la naturaleza, la pérdida de apoyo para la conservación y la reducción del turismo han expuesto a muchos ecosistemas y especies a riesgos mayores.
A continuación, se presentan cinco estrategias para minimizar el impacto ambiental durante los viajes, según la revista Condé Nast Traveler (CNT):
1. Reducir el número de vuelos: Optar por medios de transporte terrestre como trenes o coches eléctricos es una opción más ecológica. Aunque las aerolíneas están avanzando en la reducción de su huella de carbono, aún queda mucho por hacer.
El libro "The Green Traveller" de Richard Hammond ofrece itinerarios por el Reino Unido y Europa que evitan vuelos, promoviendo viajes que tienen un impacto positivo en el medio ambiente. Hammond enfatiza la importancia de viajar de manera consciente, especialmente frente a las emergencias climáticas.
2. Hacer que cada viaje sea significativo: La pandemia ha brindado una oportunidad para reevaluar nuestras prioridades en los viajes. Justin Francis, fundador de Responsible Travel, sugiere que los viajes deben ser más enriquecedores y beneficiar a las comunidades locales.
En lugar de considerar los viajes como una rutina, es esencial que cada experiencia tenga un propósito y apoyo a las economías locales y al entorno natural.
3. Minimizar las emisiones de carbono: El último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) revela que las emisiones de carbono están aumentando más rápido de lo previsto.
A pesar de la recuperación del sector de viajes, las emisiones globales siguen siendo una preocupación significativa. Reducir la frecuencia de vuelos y adoptar un enfoque de "viajar menos, pero mejor" se vuelve crucial para mitigar el impacto ambiental.
4. Apoyar la conservación: Los ingresos del turismo son fundamentales para la protección de la vida silvestre. La directora ejecutiva de The Long Run, Delphine King, enfatiza la importancia de apoyar a las organizaciones que financian la conservación y trabajan con las comunidades locales.
Sin este apoyo financiero, la conservación de especies y hábitats se ve gravemente amenazada, como lo demuestra el aumento de la caza furtiva en diversas regiones durante la pandemia.
5. Fomentar la biodiversidad local: En lugar de viajar a destinos lejanos, apoyar iniciativas locales que promuevan la biodiversidad es una forma efectiva de contribuir a la conservación.
En el Reino Unido, por ejemplo, evitar cortar el césped en mayo para permitir que las flores silvestres florezcan es una medida beneficiosa.
Frans Schepers, director general de Rewilding Europe, destaca que la protección de la vida silvestre ha mejorado gracias a esfuerzos prolongados en conservación.
Las experiencias recientes de desaceleración han demostrado que es posible reconectar con la naturaleza y apreciarla en su forma más pura.
Como apunta la Doctora Phoebe Carter, debemos integrar esta conciencia ambiental en nuestras actividades diarias y en nuestras decisiones de viaje futuras.
El turismo responsable y la conservación local no solo benefician al medio ambiente, sino que también enriquecen nuestras experiencias personales.