En la localidad de Kimovsk, situada en la región de Tula, Rusia, se encontró el cuerpo sin vida de una mujer identificada únicamente como Tatyana, de 59 años, dejando una foto bastante cruda de ver.
Las autoridades y los informes preliminares indican que Tatyana fue atacada por un grupo de perros y que su fallecimiento se debió a una considerable pérdida de sangre causada por las heridas.
Tatyana, quien trabajaba en una fábrica de la región, solía extender su jornada laboral hasta altas horas después de su turno, según mencionó una persona cercana a ella.
Los caninos involucrados en el ataque se cree que pertenecen a un ermitaño que reside en un bosque cercano, junto a aproximadamente sesenta perros.
Este hombre, originario de Moscú, comentó que los perros, en su búsqueda de alimento, suelen alejarse del área del bosque. Además, señaló que regularmente alimenta a los animales con una mezcla de harina, verduras, desechos de una panadería local y vísceras.
Las autoridades locales investigan las circunstancias exactas del ataque y la responsabilidad del cuidador de los perros, mientras la comunidad de Kimovsk expresa su preocupación ante la presencia de tantos animales salvajes en la zona.