Un sargento de la Policía Militar irrumpió violentamente en una clínica médica y asesinó a su esposa, Amanda Fernandes, a balazos y puñaladas, en presencia de su hija menor, quien también resultó herida. El crimen se calificó como un acto de femicidio y generó gran conmoción en la ciudad.
El agresor fue identificado como Samir Carvalho, sargento de la Policía Militar, quien fue detenido en el lugar. La víctima, Amanda Fernandes, fue declarada muerta por el equipo del Servicio de Atención Móvil de Urgencia (Samu).
La hija de la pareja, cuyo nombre no fue revelado, fue herida de bala en la pierna y el hombro, pero se encuentra fuera de peligro.
El hecho ocurrió el lunes en una clínica médica ubicada en la ciudad de Santos, en el estado de São Paulo, Brasil.
Según el informe preliminar de la Policía Civil, Samir Carvalho descubrió que su esposa e hija se encontraban en una consulta médica.
Amanda ya había alertado al médico de que su esposo la estaba acosando, lo que llevó al profesional a refugiarse en una sala con ambas mientras pedía ayuda a la policía.
Cuando los agentes llegaron, Carvalho levantó la camisa para mostrar que no estaba armado. Sin embargo, apenas se abrió la puerta, extrajo un arma oculta, disparó contra su esposa e hija, y luego utilizó un cuchillo para apuñalar a Amanda al menos diez veces, provocándole la muerte.
El agresor fue arrestado inmediatamente y trasladado a la Delegación de Defensa de la Mujer (DDM) de Santos, donde se abrió una investigación por femicidio.
La Secretaría de Seguridad Pública del Estado de São Paulo (SSP-SP) emitió un comunicado en el que ofreció una versión diferente, afirmando que la policía encontró a Amanda ya sin vida y a su hija herida por impactos de bala.
El caso ha generado repudio en redes sociales y reavivado el debate sobre la violencia de género y la necesidad de protección efectiva para mujeres en situación de riesgo, incluso cuando el agresor pertenece a fuerzas de seguridad.