Rejane

Rejane, de 42 años y de origen brasileño, se convirtió este miércoles en Viveiro en la primera víctima de violencia de género en la provincia de Lugo en 2024 y la quinta de Galicia, España. Su pareja, Ramón Cazás, taxista de profesión, la mató, presuntamente, de múltiples cuchilladas en el piso de Covas que ambos compartían.

El asesinato de esta vecina de Viveiro, que trabajaba en un supermercado, ocurrió al mediodía. Desde la Subdelegación del Gobierno confirmaron que no existían denuncias previas por violencia de género y que, por tanto, no figuraba en los registros del sistema Viogen.

El hombre, natural de Covas, llamó después del crimen a un familiar mostrándose muy alterado e indicándole que iba a suicidarse. Este pariente avisó a un policía nacional que se encontró en la calle en ese momento tras recibir la llamada del presunto asesino, ante el temor de lo que pudiese hacer.

Varios vehículos policiales se desplazaron al lugar hallando a Cazás herido y solicitando asistencia sanitaria para él, que había intentado quitarse la vida y se había causado diversos cortes.

Los policías encontraron sin vida a la mujer en otra estancia de la vivienda. Eso provocó la movilización de agentes de las unidades de la Policía Judicial y Científica, quienes recabaron pruebas en el interior del piso para determinar cómo sucedieron los hechos.

Una ambulancia de Urxencias Médicas del 061, escoltada por una patrulla, desplazó al herido al Hospital da Mariña, ubicado en Burela, donde lo operaron de una muñeca. Este jueves ha recibido el alta y permanece en la Comisaría de la Policía Nacional a la espera de pasar a disposición judicial. En un primer momento se hace cargo este juzgado, pero lo previsible es que se inhiba en favor del 2 porque es el especializado en casos de violencia machista.

Con la víctima y su presunto asesino, que según una amiga llevaban 16 años como pareja, convivía un hijo de ella de 22 años, quien se acercó al edificio de Granxas 35 con la intención de ver a su madre, pero tras conversar con los policías terminó marchando en un coche policial para prestar declaración en la comisaría vivariense junto a una amiga de la progenitora.

Hacia las tres de la tarde llegó la comisión judicial, compuesta por el forense y la titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Viveiro, que asumió el caso en funciones de guardia, pero al confirmarse que se trata de un caso de violencia de género se inhibirá en favor del Juzgado de Instrucción número 2, que es el competente en esa materia.

Los agentes de la Policía Nacional les pusieron al tanto de lo sucedido y alrededor de hora y media después autorizaron el levantamiento del cadáver, que se producía minutos antes de las cuatro y media de la tarde, siendo trasladado el cuerpo al Imelga de Lugo para realizarle la autopsia.

La noticia paralizó el entorno de Granxas, donde varios establecimientos casi cesaron su actividad al mediodía ante el revuelo que se formó por la presencia policial. El asesinato causó una gran conmoción en la localidad y en todo el municipio, pero también en otros concellos de la comarca.

El Concello de Viveiro decretó tres días de luto oficial y puso las banderas a media asta, indicó la alcaldesa, María Loureiro, quien anunció un minuto de silencio para la una de la tarde de este jueves y un acto a las siete de la tarde, con declaración institucional, para expresar el rechazo al crimen machista.

El IES María Sarmiento, donde Rejane cursó estudios de Eso, acogerá otro minuto de silencio a las once menos veinte de la mañana. Burela convoca también un minuto de silencio por la mujer asesinada. Tendrá lugar al mediodía ante el consistorio.